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Itinerario, prospectiva y consecuencias del covid-19

Francisco López Segrera

Fuente: Rebelión

PRIMERA PARTE: IMPACTO GLOBAL DE COVID-19 INTRODUCCIÓN: UN PUNTO DE INFLEXIÓN Estamos en un punto de inflexión a nivel global: colapso ecológico; peligro de guerra nuclear; disrupción tecnológica; declive de la hegemonía de EE.UU.; crisis de la hegemonía de Occidente; fracturas de alianzas tradicionales entre EE.UU. y la Unión Europea. A esto se añade la […]

PRIMERA PARTE: IMPACTO GLOBAL DE COVID-19

  1. INTRODUCCIÓN: UN PUNTO DE INFLEXIÓN

Estamos en un punto de inflexión a nivel global: colapso ecológico; peligro de guerra nuclear; disrupción tecnológica; declive de la hegemonía de EE.UU.; crisis de la hegemonía de Occidente; fracturas de alianzas tradicionales entre EE.UU. y la Unión Europea. A esto se añade la Pandemia del COVID-19. Tras ella el mundo no será igual, aunque tenga un impacto menor que anteriores pandemias. En especial, si antes de un año se logra una vacuna y se universaliza con rapidez. [2]

El COVID-19, al parecer, se originó en China en Wuhan –saltó de un murciélago a un pangolín en un mercado– y viajó rápidamente a los países de Europa que más turismo reciben. Hay una clara correlación entre países con alta tasa de viajeros y en especial de turismo y COVID-19.[3] Luego la Pandemia se extendió a nivel planetario.

El COVID-19 ha tenido varias etapas. Primera: del 31 de diciembre de 2019 al 30 de enero de 2020 cuando la OMS declara alerta internacional. Segunda: del 21 de enero al 11 de marzo momento donde la OMS declara la pandemia Tercera: del 12 de marzo a mediados de abril, momento en que Estados Unidos supera Europa como un todo como mayor centro de contagios acumulados y fallecimientos. Cuarta: En desarrollo desde mediados de abril a fines  de julio. EE.UU., Brasil, Reino Unido y México ocupan los 4 primeros lugares en muertes. En Latinoamérica la Pandemia crecía a gran velocidad –144,985 el 13 de julio-, solo superada por Europa con 203,854 –con relación a los otros continentes, y se transitaba hacia la Quinta etapa.

El heroísmo del personal sanitario ha impedido que las dimensiones de la Pandemia sean más catastróficas, en especial en aquellos países en que no hay grandes brechas de desigualdad y donde se tomaron por los gobiernos medidas de prevencion drásticas como el confinamiento y el uso de mascarillas. Los países de la UE se inscriben en este caso, pese a la existencia de excepciones al inicio de la Pandemia en países como Reino Unido y Suecia, algo parcialmente rectificado en el primer caso y completamente modificado en el caso de Suecia tras autocrítica. Incluso en países sin una economía desarrollada como Cuba, o con un GINI que implica cierta desigualdad como China (51%), el control de la pandemia fue muy adecuado con pocas muertes e infectados de acuerdo al monto de la población, debido a que los gobiernos tomaron políticas sanitarias adecuadas, a diferencia de los 4 países –EE.UU., Brasil, Reino Unido y México- que están hoy liderando el ranking de fallecimientos e infectados.

Hay la percepción que los países de Asia –China, Corea del Sur, y Japón, entre otros– han manejado más adecuadamente la Pandemia que los de la UE y que los países occidentales. Algunos señalan que en esto puede haber influido la experiencia previa de Asia con el Sars, por un lado, y la aceptación cultural – por muchos de los países asiáticos – de formas de dominación autoritarias de gobierno.

Los gobiernos de derecha populista neoliberal de EE.UU., Reino Unido y Brasil, partidarios –al menos en su retórica populista– de la desglobalización y negadores del peligro que implica el virus, han contribuido a propagarlo aceleradamente y están a la cabeza, como hemos señalado, en infectados y muertes, junto a México, que tampoco ha tomado medidas adecuadas de prevención. A principios de julio Arizona, en EE.UU., con 7 millones de habitantes, declaraba cada día tantos nuevos casos como la UE con 446 millones.

2. ¿FUE LA PANDEMIA UNA SORPRESA?

La Pandemia nos sorprendió, pero ya estaba anunciada. El Foro de Davos en 2007, entre los 3 principales peligros que acechaban al mundo, incluía una posible pandemia que afectaría las vías respiratorias. El National Intelligence Council –que agrupa en EE.UU. 16 agencias de información, una de las cuáles es la CIA– publicó en 2012 su quinto informe cuatrienal “Tendencias Globales 2030: Mundos Alternativos”. Uno de los 8 cisnes negros que menciona (el sexto) es una Pandemia.[4] En septiembre de 2019 la OMS alertaba acerca de un posible peligro de esta naturaleza. Durante décadas, diversos científicos, expertos analistas del medio ambiente y líderes mundiales, han estado alertando acerca de las consecuencias de la creciente contaminación ambiental, pero la lógica del mercado ha impedido que las clases políticas –rehenes de oligarquías financieras- adopten medidas urgentes y viables para detener esta destrucción de nuestro hábitat.

El COVID-19 ha provocado no solo una crisis sanitaria global –que incluyó robos de unos países a otros de medios sanitarios– sino también una profunda crisis económica y social. La economía mundial podría presentar 2 escenarios. En el escenario optimista sin rebrote en otoño el crecimiento sería -6% del PIB a nivel mundial y esto se elevaría a un -7% (escenario pesimista) de producirse rebrotes de envergadura. El desempleo se está incrementando ya sensiblemente en todos los continentes y esto empeorará al igual que la pobreza y la pobreza extrema. Según CEPAL, la economía de la región latinoamericana caerá en -5,3% en 2020. La pobreza podría crecer en 35 millones, alcanzando los 200 millones.

La buena noticia es que el Estado emerge fortalecido frente a la apología del mercado del capitalismo neoliberal, que fue desmontando gradualmente desde los 80s el Estado de Bienestar. Se habla ahora abiertamente de nacionalizar, de relocalizar, de reindustrializar, de la necesidad de los países de tener soberanía farmacéutica y sanitaria.

3. CRISIS DE LA GLOBALIZACIÓN Y DEL SISTEMA INTERNACIONAL

La globalización ha sido atacada desde la derecha –Trump, Johnson-, pero también desde sectores de la izquierda por su deriva neoliberal. Sin duda, el COVID-19 afectará la globalización y la dependencia de mercados lejanos en aras del incremento de las tasas de ganancia. Han quedado gravemente afectados: la propia esencia de la globalización y las cadenas de valor globales (GCV); el liderazgo mundial de EE.UU.; la cooperación internacional socavada por dicho país al retirarse de la OMS, entre otras actitudes; y el mito de la austeridad fiscal como instrumento clave para la recuperación económica.

La política del Presidente de EE.UU. –“to make America great again”– en contra de la diplomacia multilateral y la cooperación, entre otros factores, ha impedido que las organizaciones internacionales y multilaterales ((LA ONU Y SUS AGENCIAS, G7, G20, FMI, OTAN, EL BANCO MUNDIAL, LA OEA, LA ORGANIZACIÓN MUNDIAL DE LA SALUD (OMS) Y LA OMC) desempeñen sus funciones con la coordinación y eficiencia necesarias, debido a las tensiones azuzadas por su política de confrontación. Trump cumplió su promesa de marcharse de la OMS, aunque esto no se hará efectivo hasta 2021.

El sistema internacional parece estar en crisis, al igual que sus principales instituciones como ONU y sus Agencias, amenazadas por los intentos de una nueva arquitectura del sistema internacional por parte de algunos de sus principales actores y en especial por la administración Trump.

4. ESCENARIOS Y ALTERNATIVAS ANTE EL COVID-19

La alternativa parece ser entre: A) Un fortalecimiento de la cooperación internacional y de la solución pacífica, negociada y diplomática de los conflictos internacionales entre las grandes potencias (EE.UU, Rusia, China, UE) y entre todos los actores internacionales. B) O bien una fractura que pudiera incrementar la guerra comercial y tecnológica que predica Trump y que nos podría llevar a una guerra nuclear. [5]

Otra consecuencia de la Pandemia ha sido que se han suspendido las hostilidades en casi todos los frentes de guerras y en que las manifestaciones contra los gobiernos han tenido una cierta pausa.

Nos hemos percatado del nivel de contaminación que existe en nuestras vidas gracias a la Pandemia. En muchos lugares se disfruta de aire limpio y se han vuelto a ver el cielo y las estrellas. El medio ambiente ha tenido un breve respiro.

El Gobierno de EE.UU. –a diferencia de lo ocurrido en la crisis del 2008– ha renunciado a la cooperación internacional en lo referido al COVID-19 (denominado por Trump el “virus chino”), y ofrece una imagen catastrófica en lo que se refiere a su control. China y Rusia le han arrebatado el liderazgo en este ámbito y también la UE.

La Pandemia ha implicado un incremento de la desigualdad, de la pobreza y de la pobreza extrema: los más afectados son los más débiles y frágiles. Países pobres, personas pobres, ancianos, mujeres, discapacitados, y discriminados por razones étnicas, religiosas o de cualquier otra índole.

¿Qué alternativas ofrecen los empresarios, las clases políticas y los intelectuales? ¿Un retorno al capitalismo neoliberal aún más deshumanizado?; ¿Formas nuevas de Estado de Bienestar?; ¿Formas de protosocialismo ante el capitalismo neoliberal?

Algunos proponen 4 posibles escenarios: 1. Retomar la senda del capitalismo neoliberal sin hacer cambios, como si no hubiera ocurrido nada. 2. Avanzar hacia el modelo de China de Estado. 3. Someternos al dominio global hegemónico de las grandes empresas tecnológicas de Occidente –Amazon, Apple, Microfoft, Facebook–, o bien de China –Alibaba, Baidu, Tencent, Huawei– decidiendo entre Silicon Valley y Zhongguancun. 4. Renovar el Estado de Bienestar, dejando atrás la modalidad neoliberal de capitalismo que se impuso a partir de los 80s.[6]

5. GIGANTES TECNOLÓGICOS Y COVID-19

Como consecuencia del COVID-19, las tendencias propias de las tecnologías de la información, comunicación, automatización, y de la disrupción y vertiginosidad tecnológica propias de la inteligencia artificial, se acelerarán exponencialmente. Las grandes empresas tecnológicas como Google, Microsoft, Apple, Amazon y Facebook y sus homólogas chinas, fortalecerán aún más su hegemonía en los mercados al incrementarse las compras online. Los empresarios nacionales y transnacionales del capitalismo neoliberal prefieren robots en las empresas. Los robots no contraen el Covid-19, ni ninguna otra enfermedad a diferencia de los humanos. Se acelerarán la automatización y la robotización en las empresas a nivel mundial en detrimento de los trabajadores tradicionales y también el tele-trabajo.

La cibervigilancia en China y Corea del Sur, ha desempeñado un papel importante en el control de la Pandemia, pero a algunos les preocupa que esto pueda ofrecer un modelo de control que atente contra la democracia.

6. CONCLUSIONES

La Pandemia a tenido impacto a nivel global: la tensión geopolítica va en aumento; se intensifica la guerra comercial y tecnológica entre EE.UU. y China; las contradicciones entre EE.UU. y la UE se incrementan; e igualmente se observan conflictos entre la UE y Rusia.

A nivel económico: se observa una crisis de la economía mundial con un descenso del PIB a -6% a nivel mundial y un crecimiento negativo en todos los países. Descenso del precio de las materias primas y del petróleo; bancarrotas y pérdida del valor de  mercado de los activos en los sectores de restauración, turismo, hostelería, y aeronáutico; incremento del valor de mercado de la industria médico farmacéutica y biotecnológica; cambios en las cadenas globales de valor a favor de priorizar seguridad logística sobre costos; reforzamiento del papel de los bancos centrales y de instituciones financieras internacionales como el FMI, Banco Mundial, Banco Interamericano de Desarrollo, Banco Central Europeo; incremento del valor del oro como valor refugio; cambios en la organización y duración de la jornada laboral; incremento del tele-trabajo; del comercio online; del dinero electrónico; y aumento de las guerras comerciales y de monedas.

A nivel político: se fortalece el poder del Estado; se incrementa la polarización política entre los partidos progresistas de izquierda y socialdemócratas y los partidos de derecha y extrema derecha; se aumentan las leyes y mecanismos de regulación y control al igual que los impuestos; se perfecciona la cibervigilancia. Habrá a nivel mundial protestas de distinto signo, pero con un denominador común: el cuestionamiento de la clase política.

A Nivel social: se :incrementa la pobreza y la pobreza extrema a nivel global y también la desigualdad social, en especial en países con menor desarrollo económico y gobiernos de derecha; recrudecimiento del racismo y del rechazo a los inmigrantes, en especial en los países desarrollados con gobiernos populistas de derecha; incremento del desempleo por bancarrota de empresas, por el auge del tele-trabajo y la crisis del turismo; generalización mundial del  distanciamiento/aislamiento social y del uso de mascarillas. A esto va unido altas tasas de desempleo que afectan a todos los países y poblaciones y en especial a los jóvenes.

La política del resentimiento y de no aceptar las recomendaciones de los científicos, propia de líderes populistas de derecha –Trump, Boris Johnson, Bolsonaro- tuvo un alto costo en infectados y fallecidos. Se burlaron de los medios de protección contra la pandemia y priorizaron la actividad económica en contra del confinamiento. Trump y Bolsonaro en especial fomentaron el conflicto político en torno al uso de las mascarillas. Al no usarlas ellos, animaron a sus seguidores a no utilizarlas con consecuencias catastróficas.

La distribución de ingresos y de riqueza de los países es una variable clave para explicar la extensión y número de muertes por COVID-19. EE.UU., Brasil y México tienen el 46% de las muertes por COVID-19 a nivel mundial y solo representan el 8,6% de la población del mundo. Sus coeficientes Gini son respectivamente: 41.4, 53.5, y 45,9. Son países profundamente desiguales. Se pudiera objetar que Reino Unido tiene un índice de GINI de 32.80 y que sin embargo el 13 de julio de 2020 era el tercer país en muertes tras Brasil, con más muertes que México, que ocupaba el cuarto lugar en dicho ranking. La explicación del alto monto de muertes en Reino Unido, pese a un menor nivel de desigualdad con respecto a dichos países, se explica a partir de las erráticas políticas del Primer Ministro Boris Johnson, que no tomo medidas adecuadas como el confinamiento para controlar la pandemia. Por tanto, para explicar el número de fallecidos, además de la distribución de la riqueza y los ingresos como variables clave, otros factores estuvieron presentes: la calidad del liderazgo, la celeridad en tomar medidas de confinamiento y la fortaleza del sistema público de salud. En Europa, el mayor número de muertes fue en Italia, Francia y España, pero esto obedeció, sobre todo, a la elevada correlación entre alto monto de turistas y COVID-19. Dichos países cuentan con buenos sistemas públicos de salud y sus gobiernos adoptaron medidas adecuadas, a diferencia de lo ocurrido en EE.UU., Brasil, Reino Unido y México.

En resumen, pese a que el número de muertes se explica no solo por la desigualdad asociada a políticas de negación de la presencia del virus y de su letalidad, es obvio que la elevada desigualdad de ingresos implica, que una gran cantidad de trabajadores de bajos ingresos, que residen en viviendas con un alto índice de hacinamiento y que viajan en medios de transporte que impiden la distancia social, deban acudir a sus trabajos a riesgo de infectarse. Las clases medias y los ricos, a diferencia de esto, habitan en viviendas amplias, viajan en sus autos y trabajan online, reduciendo notablemente sus posibilidades de infectarse.

A nivel ideológico, cultural y recreativo: se exacerba la guerra cultural, política e ideológica entre las posiciones tradicionales de izquierda y derecha, entre republicanos y demócratas en EE.UU., entre socialistas y populares en la UE; entre posneoliberales y neoliberales en América Latina; entre partidarios de la inmigración y sus críticos, entre racismo y anti-racismo, entre posiciones guerreristas y pacifistas. Aumento del uso de las tele-clases  y de la educación  no presencial. Crisis de las formas tradicionales de entretenimiento: discotecas, conciertos masivos, salas de cine y teatro. Se potencia el uso de las redes sociales y se incrementan los fake news. Se incrementa y perfecciona la cibervigilancia. Aumento exponencial del internet de las cosas, de la inteligencia artificial y de sus conceptos y aplicaciones.

En resumen, somos solo una especie más en el planeta tierra, si seguimos destruyéndolo sin respetar las demás especies, la biodiversidad, los escenarios futuros serán cada vez más catastróficos. Necesitamos cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 de ONU, derrotar la cultura del despilfarro y el consumismo irracional y avanzar hacia la frugalidad y austeridad, en un mundo de tolerancia. Espero que hagamos uso de esta oportunidad para llevar a cabo cambios trascendentales en lo ecológico, económico, social, político y cultural, que permitan construir una paz duradera en un mundo con desarrollo sostenible y sin las desigualdades económicas y sociales actuales.

SEGUNDA PARTE: EDUCACIÓN SUPERIOR Y COVID-19

  1. INTRODUCCIÓN

La Pandemia COVID-19 tiene como consecuencia una crisis generalizada de la educación superior a nivel mundial. Esto implica desafíos a la internacionalización de la educación superior, retos financieros y otros. Los estudiantes y las instituciones académicas de los países de menor desarrollo económico se verán especialmente afectados. Tanto las universidades públicas como las privadas se están enfrentando a retos financieros que exigen innovación. Las universidades que ocupan los primeros lugares en los rankings, esto es, las universidades de investigación y las universidades nacionales de investigación, sobrevivirán a la crisis. Pero las universidades de dudosa calidad y malos resultados en la inserción en el empleo de sus graduados, tendrán que cerrar sus puertas. Es algo que ya venía ocurriendo debido al desarrollo de la automatización y de la inteligencia artificial. Ahora este proceso se acelerará.

Las resistencias habituales, la desconfianza y la sospecha hacia la ES virtual, se incrementará en algunos profesores y alumnos, que incluso renunciarán a sus trabajos de profesores o a su condición de alumnos. Los más resilientes se adaptarán a la nueva normalidad. La ES virtual y/o híbrida se impondrá y predominará sobre la ES tradicional presencial, o bien a distancia tradicional (uso de papel) alejadas de la tecnología o con uso puntual de ella en zonas de baja cobertura.

La crisis de COVID-19 está transformando a la educación superior en todo el mundo a nivel nacional, institucional e individual. Sin duda, esta pandemia tendrá un impacto muy significativo en la educación superior a nivel mundial. Aunque aún es temprano para hacer una prospectiva profunda y completa de su impacto, trataremos de identificar algunas de sus implicaciones futuras. La educación superior (ES) presencial demorará en regresar. Cuando lo haga, habrá sufrido modificaciones esenciales. Es probable que la ES virtual se incremente. Que se adopten formas mixtas (blended) de ES y que se busque integrar en un mismo curso ES presencial y virtual, no como espacios separados sino integrados. Las tradicionales clases presenciales, no solo se transformarán en virtuales o mixtas, sino que se pasará a “clases invertidas”, en las que el profesor aclara dudas en lugar de impartir una clase magistral. Los procesos propios de la automatización y de la inteligencia artificial, tras el COVID-19, acelerarán aún más los cambios que ya se venían produciendo en la ES. Tanto en el grado como en el posgrado, tanto en los objetivos y contenido de los planes de estudio como de las asignaturas. Algunas universidades están desarrollando con éxito los programas virtuales desde que se produjo la suspensión de la ES presencial, pero otras están demostrando deficiencias e incluso la imposibilidad de migrar a lo virtual por diversas razones, incluida la deficiente conectividad.

Las IES no regresarán a las mismas formas en que operaban antes del Covid-19. Las medidas sanitarias para recuperar la ES presencial serán costosas. El personal académico y administrativo podrá ver reducido sus salarios e incluso eliminados sus puestos de trabajo – en especial en las universidades privadas -, donde algunos alumnos exigirán la reducción en el costo de la matrícula en los cursos no presenciales. Surgirán nuevas formas de enseñanza, aprendizaje y evaluación. Muchas IES desaparecerán o verán muy reducidas sus actividades y número de alumnos.

En resumen, como señalan Phillip Altbach y H. De Wit: “las implicaciones para la educación superior serán considerables y en su mayoría negativas, ampliando las brechas y desigualdades entre los estudiantes, las instituciones y los países. Habrá variaciones significativas a nivel mundial, con la probabilidad de que las universidades de la parte más pobre del mundo se vean más severamente afectadas”. [7]

2. CAMBIOS PREVISIBLES[8]

  • La demanda se reducirá sensiblemente durante varios cursos académicos.
  • Los profesores y los estudiantes –al igual que el personal que trabaja en las IES y los proveedores de servicios a ellas– serán los más afectados.
  • Las universidades privadas –e incluso las públicas– se verán obligadas a reducir el costo de las matrículas en los estudios de grado y en especial en los de posgrado, que suelen ser mucho más costosos.
  • La ES virtual y mixta (blended) crecerá exponencialmente.
  • Las IES de menor calidad desaparecerán.
  • La matrícula en el posgrado se reducirá sustancialmente hasta tanto no se supere la crisis del Covid-19 y surja una vacuna. Pero incluso en ese escenario sufrirán un descenso, dado la crisis económica que impactará a los potenciales alumnos.
  • La competencia de universidades virtuales extranjeras afectará la matrícula en las universidades nacionales en el grado y en especial en el posgrado.
  • La búsqueda de la equidad será un objetivo de los sistemas de educación superior y tendrá un peso mayor en las políticas educativas.
  • Se enfatizarán los programas de extensión solidarios, el papel de la universidad en la comunidad y su responsabilidad social.
  • En los nuevos planes de estudio y programas se valorará y priorizará el por ciento de acceso al empleo de los graduados; y las universidades –tanto públicas como privadas– harán un seguimiento más riguroso de la trayectoria laboral de sus graduados.
  • Los planes de investigación sufrirán duros recortes y deberán adecuarse a las necesidades del Estado y/o del Mercado para obtener financiamiento adecuado.
  • Las Redes de ES –tanto nacionales como internacionales- deberán reformular sus alianzas y plantearse nuevos objetivos.
  • Las organizaciones multilaterales como UNESCO, Banco Mundial y OCDE –entre otras– deberán preparar documentos de análisis de esta “nueva normalidad”, facilitar financiamiento y crear observatorios de buenas prácticas al respecto.
  • La III Conferencia Mundial de ES de UNESCO, programada para celebrarse en 2021, debería marcar un hito ofreciendo nuevas formas de enseñanza ad hoc acordes con la “nueva normalidad”.
  • También los tanques pensantes de ES deberán producir documentos de análisis de esta “nueva normalidad” y ofrecer recomendaciones al respecto.
  • Los webinars proliferaran y democratizarán el acceso a la ES.
  • La internacionalización de la ES adoptará nuevas formas totalmente virtuales o mixtas en detrimento de lo presencial.
  • Habrá una reducción sensible del monto de universidades internacionales, debido al cierre de fronteras de los países receptores de estudiantes internacionales y de la crisis económica que afecta a los países emisores.
  • Los países receptores de estudiantes internacionales formularán nuevas leyes y reglamentos, haciendo más restrictivo el otorgamiento de visados para estancias de larga duración. Esto afectará también a los profesores internacionales, causando un impacto negativo en la calidad de la ES a nivel mundial, tanto en las IVY League de EE.UU. como en las universidades nacionales de investigación de los países con menor desarrollo económico.
  • Dado que las universidades públicas –y en especial las privadas– verán afectados sus presupuestos al reducirse la matrícula, esto pudiera implicar una disminución sensible de la contratación de profesores internacionales de alto nivel. En caso de ser invitados, se les planteará una reducción de sus honorarios, medida que muchos no aceptarán afectando esto a la calidad de la enseñanza.
  • Sin embargo, este riesgo se podrá convertir en una oportunidad, pues ante el incremento de la ES virtual, muchas universidades nacionales pudieran incorporar a sus aulas –en determinados cursos de grado y posgrado, de manera permanente y con mayor número de horas de clase- a profesores internacionales de alto nivel, que ya no tendrían que desplazarse al país donde radica dicha universidad.
  • Se adoptarán medidas sanitarias de amplio alcance en las IES con el objetivo de cumplir con las nuevas legislaciones nacionales al respecto.
  • Muchos docentes y dirigentes académicos (rectores, vicerrectores, decanos, directores) no se adaptarán a esta “nueva normalidad” y se producirán muchas deserciones y jubilaciones de la profesión académica.
  • A todos los profesores y directivos se les exigirá un mínimo de conocimiento de las innovaciones tecnológicas y de plataformas como ZOOM, como requisitos indispensables para mantener sus cargos en las IES, en especial en las universidades privadas.
  • También al personal administrativo se le exigirá un mínimo de alfabetización tecnológica para mantener sus empleos en esta “nueva normalidad”.
  • Los procesos de evaluación y acreditación deberán incorporar y/o perfeccionar en sus indicadores, en forma rigurosa, elementos para evaluar, adecuadamente, el nivel de los conocimientos tecnológicos de las IES -del personal académico y administrativo- como un elemento clave a evaluar.
  • Se priorizará como un elemento clave la calidad de la conectividad.
  • Los rankings internacionales y nacionales de universidades se ajustarán a esta “nueva normalidad”, que si bien no afectará mucho a las universidades que suelen ocupar los primeros lugares en todos los rankings, si afectará y reordenará a las universidades latinoamericanas que no sepan estar a la altura de la “nueva normalidad” y “aggiornarse” (ponerse al día) rápidamente.

3. CONCLUSIONES.

Espero que en esta Era, que ojalá pronto sea, gracias a una vacuna, la Era Post-COVID-19, las instituciones de educación superior (IES) y las universidades, cumplan adecuadamente la función social que espera la sociedad de ellas, no solo en cuanto a equidad en el acceso, sino también en lo que se refiere a una mayor retención y graduación de los estudiantes universitarios y a estar en el estado del arte en conocimientos, informaciones y propuestas de soluciones, para lograr un adecuado desarrollo sostenible humano y social. La universidad sigue siendo una trinchera clave para enseñar a enfrentar los principales retos de nuestro tiempo: la disrupción tecnológica, el cambio climático, el peligro nuclear y la desigualdad. [9]

NÚMERO DE PERSONAS FALLECIDAS POR COVID-19, 14 JULIO 2020 POR PAÍSES.

Notas

2) Ver en la web de CEPAL https://www.cepal.org/es/temas/covid-19, el impacto que tendrá la Pandemia en América Latina y el Caribe y su Informe Conjunto con la FAO acerca de cómo evitar que el COVID-19 se convierta en una crisis alimentaria. Para un enfoque teórico de causas y consecuencias del COVID-19 ver los trabajos de Ignacio Ramonet “La pandemia y el sistema mundo”. Le monde diplomatique, 23 abril 2020. B. de Sousa Santos (2020): “La cruel pedagogía del virus». https://www.clacso.org/; A. Borón: El Mundo después de la Pandemia: conjeturas y proyectos. Borrador inédito, junio 2020. F. Mayor Zaragoza: La Paz y la palabra en tiempos de COVID-19. https://www.youtube.com/watch?v=lcWkGoHFWhk. Yuval Noah Harari: ¿Por qué esta grave crisis sanitaria difiere de las anteriores y qué nos enseña? El Correo de la UNESCO, mayo 2020. Salvador López Arnal: Entrevista a Alfredo Caro Maldonado sobre la COVID-19. Junio 29, 2020. http://slopezarnal.com/entrevista-a-alfredo-caro-maldonado-sobre-la-covid-19-vii-1/. J. D. Sachs: Mortalidad por la COVID-19 y desigualdad. El País, 12 julio 2020, Suplemento Ecónomico. Si bien el 7mo Informe de GUNI – Humanities and Higher Education -se publicó el 10 de diciembre de 2019, cuando aún no conocíamos que en breve se identificaría la Pandemia, sus artículos llevan implícito muchas recomendaciones para transformar la ES en la Post-Pandemia. Ver al respecto del Director de GUNI Josep Vilalta su webinar de julio de 2020 “Community Engagement and Social Responsablilty in Higher Education: Balancing the Global with the Local”. www.guninetwork.org

3) Los seis países que reciben mayor turismo internacional son: Francia, 86 millones, España 81, EE.UU. 75, China 60, Italia 58, México 41, Reino Unido 37,7, Turquía 37,6, Alemania 37,5, Tailandia 34,4.

4) F. J. Mojica y F. López Segrera (2015). Hacia dónde va el mundo, pp.142-147. El Viejo Topp, Barcelona.

5) EL GOBIERNO DE TRUMP DESEA DESPLAZAR A CHINA DEL MERCADO SO PRETEXTO DE ESPIONAJE EN 4 ÁREAS: la fabricación de teléfonos móviles, las telecomunicaciones de quinta generación (inteligencia artificial), los automóviles eléctricos y las energías renovables.

6) D. Acemoglu. El gobierno que queremos. El País 5 julio 2020, Suplemento IDEAS.

7) P. Altbach and H. De Wit: «Postpandemic for higher education is bleakest for the poores.» IHE, Special Issue. N. 102, June 2020

8) IESALC: COVID-19 y el día después, 6 abril 2020. https://www.iesalc.unesco.org/; C. M. Lopera: 125 Cambios que provocará el Covid-19 a las IES. El Observatorio de la universidad colombiana. Mayo 2020. www.universidad.edu.co. C. Parker: “Docencia a distancia en el posgrado en condiciones de emergencia sanitaria. USACH, 10 de junio 2020. Ver en la web de CEPAL https://www.cepal.org/es/temas/covid-19, el impacto que tendrá la Pandemia en América Latina y el Caribe y su Informe Conjunto con la FAO acerca de cómo evitar que el COVID-19 se convierta en una criisi alimentaria. Para un enfoque teórico de causas y consecuencias del COVID-19 ver los trabajos de Ignacio Ramonet “La pandemia y el sistema mundo”. Le monde diplomatique, 23 abril 2020. B. de Sousa Santos (2020): “La cruel pedagogía del virus». https://www.clacso.org/; Yuval Noah Harari: ¿Por qué esta grave crisis sanitaria difiere de las anteriores y qué nos enseña? El Correo de la UNESCO, mayo 2020.

9) Vid. F. Mayor Zaragoza: Higher Education in the New Era. En Informe 7 de GUNI. https://www.clacso.org/

Francisco López Segrera. Profesor Titular Adjunto del ISRI (CUBA); Consultor de la Global University Network for Innovation (GUNI), ACUP, Barcelona; Profesor Titular Adjunto del Centro de Pensamiento Estratégico y Prospectiva de la Universidad Externado de Colombia.

MC

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